Ubicación: El hostal está muy cerca de atracciones populares como el Empire State Building y el Madison Square Park. Es como tener un bar de chocolate en la misma cuadra. Y para los amantes de la comida, hay restaurantes y bares alrededor para deleitar al paladar. Desayuno continental: Imagínate despertar y saborear un delicioso desayuno con panes, pasteles, frutas y bebidas calientes. Es como tener un banquete estilo brunch en tu propio hogar lejos de casa.

Espacios pequeños: Los espacios en el hostal, especialmente en las habitaciones pequeñas, pueden ser un poco reducidos. Pero si eres un maestro del tetris, te sentirás como en casa.

La ubicación del alojamiento es ideal, cerca de muchas paradas de metro y a pocos minutos del Empire State. Todo está impecablemente limpio, incluyendo los baños compartidos y la cocina. El desayuno es delicioso, con bagels, donuts, bollería y fruta fresca. Muy recomendable.

Los espacios son bastante reducidos, especialmente en las habitaciones pequeñas. Tuvimos que poner la maleta debajo de la cama.

El hotel está muy limpio, tanto las habitaciones como las áreas comunes. El desayuno es muy completo y delicioso. La ubicación es excelente, cerca de la estación de metro y de los lugares turísticos en el centro de la ciudad. El personal es muy amable y servicial.

No pude encontrar ningún fallo.

La ubicación y la zona son muy buenas, cerca de los subtes y lugares turísticos. El desayuno es completo y sabroso.El personal es amable y atento.Solucionaron rápidamente un problema eléctrico en la habitación.

De verdad no hay nada que no me haya gustado.

Precio bueno, amabilidad del personal, instalaciones sorprendentes, cocina para guardar comida, amplia habitación con lavabo, desayuno completo.

Me gustó todo.

La ubicación es perfecta para moverte por la ciudad. A media hora prácticamente andando de cualquier punto de interés hacia el norte o sur. La amabilidad del personal y su atención y de destacar el desayuno, para mi gusto muy completo, con fruta fresca todas las mañanas, donuts. todo muy rico. La limpieza de la habitación y de sus zonas comunes. Es un alojamiento con encanto al estar ubicado en la típica casa neoyorkina. Los baños aun siendo compartidos siempre los encontré libres y limpios. Un saludo para el inquilino Gustav que vivía en la habitación 2. Un hombre con el que pasamos un agradable rato charlando. Recuerdos de Carla y Celia. Gracias.

Me sentí como si estuviera en casa, no tengo ninguna razón para quejarme.

Mi estancia en este alojamiento fue simplemente increíble! La ubicación era perfecta para moverme por la ciudad, ya que estaba a solo media hora caminando de cualquier punto de interés hacia el norte o el sur. El personal era extremadamente amable y atento, y quiero destacar especialmente el delicioso desayuno que ofrecían. Para mí, era muy completo, con fruta fresca todas las mañanas, donuts, cereales, pastel. El alojamiento tenía un encanto especial, al estar ubicado en una típica casa neoyorkina. ¡También quiero enviar un saludo al inquilino Gustav, con quien tuvimos agradables charlas! Muchas gracias, Carla y Celia.

Qué lástima que no pude quedarme más tiempo! 😔

Ubicación perfecta, desayuno completo, personal amable, limpieza impecable.

Nada, todo fue maravilloso.

Las mejores cosas de este hotel fueron la ubicación y el desayuno. Está cerca del transporte público, con una estación de metro muy cercana y a poca distancia a pie de las principales atracciones turísticas. Además, el desayuno ofrecía una variedad de opciones, como fruta fresca, donas, cereales y gofres. nos gustó la amabilidad del personal, que nos brindó un excelente servicio durante nuestra estadía.

Nada que decir.

Lo que más me gustó fue el precio. Es una opción económica comparada con otros lugares donde me he hospedado. Además, el personal fue amable y atento durante toda mi estadía. La ubicación también fue conveniente, cerca de estaciones de metro y tiendas locales.

Lo que menos me gustó fue la limpieza. Aunque intentaron mantenerlo limpio, noté algunos problemas, especialmente en los baños.

el alojamiento superó mis expectativas, especialmente en comparación con mi anterior estadía en Nueva York. La ubicación es perfecta, cerca de paradas de metro y a pocos minutos a pie del Empire State. Todo estaba impecablemente limpio, tanto las habitaciones como los baños compartidos. El desayuno era delicioso, con bagels recién hechos, fruta y bollería. Muy recomendable.

no hay ascensor, así que si llevas maletas grandes debes estar preparado para subir muchas escaleras.

La ubicación es perfecta para moverte por la ciudad. A media hora prácticamente andando de cualquier punto de interés hacia el norte o sur. La amabilidad del personal y su atención y de destacar el desayuno, para mi gusto muy completo, con fruta fresca todas las mañanas, donuts, cereales. todo muy rico. La limpieza de la habitación y de sus zonas comunes. Es un alojamiento con encanto al estar ubicado en la típica casa neoyorkina. Los baños aun siendo compartidos siempre los encontré libres y limpios. Un saludo para el inquilino Gustav que vivía en la habitación 2. Un hombre con el que pasamos un agradable rato charlando. Recuerdos de Carla y Celia. Gracias.

Me sentí como si estuviera en casa, no tengo ninguna razón para quejarme.

La ubicación del hotel es perfecta. Está cerca de la estación de metro, lo que facilita el desplazamiento por toda la ciudad. Además, se encuentra en el centro de Manhattan, por lo que está rodeado de lugares turísticos de interés. La habitación en la que me alojé estaba limpia y cómoda, y el baño compartido siempre estaba libre y limpio. destacaría la amabilidad del personal, que estuvo siempre dispuesto a ayudar. El desayuno incluido era muy completo, con opciones como fruta fresca, donuts, cereales y pastel.

Uno de los aspectos negativos del hotel fue la falta de presión en la ducha y la dificultad para regular la temperatura del agua. Pero a pesar de esto, la comodidad y la amabilidad del personal hacen que la estancia sea agradable.